InnovarSiguiendo el hilo de la entrada anterior Innovar en mi catálogo de servicios, ¿por qué?, la aproximación proactiva a nuestros usuarios y clientes nos permite identificar necesidades y, de esta forma, elaborar una lista tentativa de oportunidades de mejora que podemos estudiar como estrategia previa para definir un plan de innovación sencillo, útil y muy orientado a resultados.

Podemos partir de una premisa: que las innovaciones no impliquen necesariamente nuevas inversiones. En el supuesto de que sean necesarias, las deberás argumentar de forma cualitativa y cuantitativa, expresando claramente los beneficios esperados y las mejoras obtenidas. Sólo así facilitaremos la toma de decisiones y tendremos más oportunidades de disponer de los medios para innovar.

¿Es posible innovar sin invertir? Probablemente en algunos casos si, y es una magnífica carta de presentación para captar la atención sobre la estrategia de mejora. Quizá cuando tenga que solicitar medios ya disponga de resultados que avalen su buen hacer.

Para recorrer este camino de innovación, una buena idea puede ser apoyarnos en las preguntas de Osborn como punto de partida para reflexionar y, probablemente, encontrar alguna respuesta útil.

Así pues, pasemos a la acción. Con la lista de sugerencias de mejoras priorizadas, podemos plantearnos algunas cuestiones como:

1.- ¿Podría reutilizar algo de lo disponible para otro uso, bien en el mismo estado o modificándolo? Este algo pueden ser, por ejemplo, infraestructuras, tecnología, procedimientos, recursos humanos, proveedores, etc.

2.- ¿Podría adaptar algo de lo existente a alguna de las necesidades identificadas? Esta adaptación incluye la emulación, es decir, copiar algo respetando los derechos de propiedad intelectual y haciendo el reconocimiento oportuno. Quizá, incluso, si observa soluciones pasadas pueda adaptarlas a los nuevos tiempos. Eso se hace constantemente en el mundo de la moda y de la música.

Cuántas veces, indagando, hemos encontrado en nuestra organización medios y/o soluciones que llevamos tiempo buscando.

¿Ha pensado que sólo con preguntar o solicitar ayuda de forma oportuna e inteligente en su propia organización obtenga la solución, quizá a coste cero?

Emilio Sanz / www.conocimientopractico.es  / @InfoPractico